¿Es realmente necesario su uso?
Actualmente, el calzado de seguridad es una pieza clave en la uniformidad de muchos sectores laborales. Por ese motivo, profesionales del mundo de la sanidad, limpieza, alimentación, estética o industria, son tan solo un ejemplo de la multitud de sectores que necesitan y hacen uso de un calzado de seguridad en su día a día.
Según el real decreto 773/1997, los equipos de protección individual deberán utilizarse cuando existan riesgos para la seguridad o salud de los trabajadores. Riesgos que, por otra parte, no hayan podido evitarse o limitarse suficientemente por medios técnicos de protección colectiva o mediante medidas, métodos o procedimientos de organización del trabajo.

¿Quién necesita un calzado de seguridad?
Los trabajadores que estén expuestos a los siguientes factores de riesgo, deben hacer uso de calzado de seguridad. Asímismo, dependiendo de los riesgos a los que se enfrenten, necesitarán uno u otro tipo de calzado.
- Riesgos mecánicos:
- Caídas de objetos o aplastamiento de la parte anterior del pie.
- Caída e impacto sobre el talón del pie.
- Caída por resbalón.
- Caminar sobre objetos puntiagudos o cortantes.
- Acción sobre: Los maléolos. El metatarso. La pierna
- Acciones eléctricas:
- Baja y media tensión (aislamiento eléctrico).
- Alta tensión (conductibilidad eléctrica).
- Riesgos térmicos:
- Frío o calor (aislamiento térmico).
- Proyección de metales en fusión (resistencia y estanquidad).
- Acciones químicas:
- Polvos o líquidos agresivos (Resistencia y estanquidad)
Tipos de calzado de seguridad
– Calzado de seguridad:
Éste es el calzado que incorpora elementos para proteger al usuario de riesgos que puedan dar lugar a accidentes, también está equipado con tope de seguridad para proteger la parte delantera del pie (dedos).
Además, está diseñado para ofrecer protección contra el impacto cuando se ensaya con un nivel de energía de, al menos, 200 J y contra la compresión cuando se ensaya con una carga de, al menos, 15 kN
– Calzado de protección:
Calzado que incorpora elementos para proteger al usuario de riesgos que puedan originar accidentes, equipado con tope de seguridad para proteger la parte delantera del pie (dedos).
También está especialemente diseñado para ofrecer protección contra el impacto cuando se ensaya con un nivel de energía de, al menos, 100 J y contra la compresión cuando se ensaya con una carga de, al menos, 10 Kd.
– Calzado de trabajo:
Se trata del calzado que incorpora elementos para proteger al usuario de riesgos que puedan dar lugar a accidentes. Aún así, no garantiza protección contra el impacto y la compresión en la parte delantera del pie.
Dependiendo del material de fabricación, se distinguen dos clasificaciones:
• Clasificación I:
Es el calzado fabricado con cuero y otros materiales, como consecuiencia, quedan excluidos calzados todo de caucho o todo polimérico.
• Clasificación II:
Es el calzado confeccionado íntegramente en caucho (por ejemplo, completamente vulcanizado) o en polimérico (por ejemplo, completamente moldeado).
En resumen, cualquiera de los tres tipos, con las dos clasificaciones posibles, tienen una serie de prestaciones que les permiten ofrecer protección frente a diversos riesgos.
Clases y categorías del calzado de uso profesional, en ISO – 20344
Por otro lado, nos gustaría facilitaros unas tablas para que podáis ver más claramente el esquema anterior.

Finalmente, nos gustaría recordaros que, en Balear de uniformes, disponemos de una gran variedad de tipos calzado que se adaptan perfectamente a las necesidades de vuestros puestos de trabajo. De hecho, estaremos encantados de asesoraros para elegir el calzado que más os conviene, sin ningún compromiso.
Super importante en segun que trabajos, sobre todo para aquellos que trabajan en obras, reformas, segun que fabricas…… Muy completo el post!